Reflexiones "Nueva tesis sobre el cuento" por Martina Gaggero

Taller de expresión I Cátedra Reale - comisión 56, Santiago Castellano.

Trabajo original e individual por Martina Gaggero.

Actividad: reflexionar sobre “Nueva tesis sobre el cuento”.

 

A partir de la lectura sobre “Nueva tesis sobre el cuento”, podríamos decir que los comienzos y finales de las narraciones en su mayoría depende del autor y la manera en la que afronte el relato, pero también es cierto que hay un punto de encuentro entre ellos. Por ejemplo, Borges tiene una particularidad en sus cuentos donde los comienzos son inciertos y dudosos mientras que los finales parecen espontáneos, pero esconden cierta premeditación ya proyectada. Hay algo del final que se encuentra en el origen y se posterga de tal manera que aparezca cuando menos se espera. Franz Kafka, por su parte, sostiene que el cuento ya lleva una forma en sí, que en algún momento se vislumbrará. Aquellos finales, al fin y al cabo, son quienes terminan de darle sentido a la narración. Hay un engaño inicial que se revela al final cuando aparece la historia escondida y secreta.

Siempre hay un doble movimiento: algo incomprensible, que sucede y está oculto. Se pueden contar de distintas maneras, cada autor le da el sentido al relato según cómo descubre aquello que quiere contar.

Por ejemplo, frente al relato de Chuang Tzu, Kafka se hubiera enfocado en narrar sobre la postergación incesante que esconde la cobardía del pintor al tener que mostrarle al rey su dibujo ya realizado. Borges hubiera cambiado el cangrejo por una mariposa y contaría que al pintarla la sueña, pero cuando despierta no sabe si es un hombre que sueña que es una mariposa o una mariposa que sueña que es un hombre. En este caso, Chuang tarda y posterga porque alucina que se transforma en lo que quiere pintar.

Frente al relato de “Gritos y susurros” guionado por Bergman, donde aparece un desvío y un cambio, Hemingway contaría una conversación insignificante entre las tres mujeres sin mencionar que se han juntado para velar a una hermana, mientras que Kafka relataría la historia desde la mujer que muere y no soporta los murmullos de sus tres hermanas que hablan de ella en el cuarto de al lado. De esta manera, cada narrador detallará lo que ha visto, enfocándose en lo que quiera contar y a su vez, ocultar.